martes, 24 de abril de 2012

Los Pulmones de las Cabezas de Hierro.


“Y has de saber más: que el buen caballero andante, aunque vea diez gigantes que con las cabezas no sólo tocan, sino pasan las nubes, y que a cada uno le sirven de piernas dos grandísimas torres, y que los brazos semejan árboles de gruesos y poderosos navíos, y cada ojo como una gran rueda de molino y mas ardiendo que un horno de vidrio, no le han de espantar en manera alguna, antes con gentil continente y con intrépido corazón los ha de acometer y embestir, y, si fuere posible, vencerlos y desbaratarlos en un pequeño instante, aunque viniesen armados de unas conchas de un cierto pescado que dicen que son mas duras que si fuesen de diamantes, y en lugar de espadas trujesen cuchillos tajantes de damasquino acero, o porras ferradas con puntas asimismo de acero, como yo las he visto más de dos veces.”
Miguel de Cervantes, Don Quijote de la Mancha.

22 de abril de 2012

CA! BE! ZAS! … CA! BE! ZAS!!



Se trataba de las Cabezas de Hierro, no las nuestras, que tampoco desmerecen.

mapa


perfil


Las Cabezas de Hierro es una de las rutas más exigentes que se pueden hacer por la zona de Cotos. Si se decide subir por su cara Norte, por los Pulmones, aquello no tiene desperdicio. Toda una clásica.












A esta zona le tengo un especial cariño, por ella, por el Circo de las Cerradillas, empecé a conocer la Sierra de Madrid, aquí empezaron mis primeras lecciones sobre que era un piolo y unos pinchos. Ya hace años de aquello, aquí seguimos, sin haber salido de “promesas amateur”.

Hacía dos añosque no me acercaba por allí, ya tocaba. Vamos Buscasombras y yo, a ver que hay allí arriba.

La noche había sido dura, y corta, a las 8 de la mañana estamos del parking de Cotos, ya a medio ocupar. El fresco de la mañana, agradable, limpio, me recupera para la vida, parece que empiezo a ser persona.


Nos sorprende la cantidad de nieve que hay … ¡¡¡está será la primera invernal del año en Navacerrada!!!  ¡¡¡el 22 de abril!!! ¿Cuenta como invernal? La verdad es que en todo el año, no hemos tenido ningún día con más nieve de la que había en ese momento. Además … nieve de buena calidad … el día prometía, empezaba bien.



La ida, hasta las Cerradillas, cruzando esos pinares, herederos de los próximos de Valsaín, casi eternos, cruzados por los arroyos Guarramillas y de las Cerradillas que parecen surtir de vida constante a los mismos, todavía poco concurridos, con lo difícil que eso es en Madrid, discurre entre uno de los lugares idílicos de la Sierra Madrileña, donde uno puede disfrutar de forma sosegada de lo que le rodea.







 Al salir del pinar, pronto se perciben los Pulmones de las Cabezas. El topónimo es perfecto, no tienen confusión, son inconfundibles. La idea es cruzar por entre ambos pulmones, una de las rutas clásicas a las Cabezas. Nos dejará en la Cabeza Mayor (sin contar alguna que llevábamos debajo del casco).

Siempre que me he planteado esta ruta pienso dos cosas. Lo primero si es invierno … “como ahora a finales de abril” … hay que gastar mucho cuidado, es una zona de frecuentes accidentes, donde por desgracia no es raro escuchar que alguien se ha dejado allí algo más que el sudor. Hay que respetarla.




Lo segundo, esta durante todo el año, las cabezas siempre me engañan. Subir las cabezas por las Cerradillas se hace largo, más de lo que uno cree, cuando crees que vas a llegar … todavía te queda un rato. Además, para terminar de “matarte”, al volver, cuando ya solo se piensa en la cervecita, fresquita, con botella helada, uuuuummm … todavía tienes que subir al Pingarrón. Te mata. Te peta.

Así llegamos a la base de los Pulmones. Alguno ya nos ha tomado la delantera, ¿somos … tercero y cuarto en el día de hoy? Otro está petado a mitad de cuesta, “el Petao”, sin entrar en los Pulmones sigue al Collado, no se da la vuelta, va acompañado, su día será largo, muy largo. No eligió buena ruta, no fue bien asesorado.





Nos metemos en los Pulmones por su parte derecha, acercándonos a las cascadas de hielo, formadas, pero de mala calidad, hielo nevera. Vamos cruzando, intentando alargar el trayecto en la medida de lo posible, para salir por el lado izquierdo, después de negociar un par escalones. Es lo mejorcito que hemos sacado del invierno en esta Sierra. Divertido.









Ya desde arriba de los pulmones, no perdemos de vista al “Petao”, la verdad es que el hombre tiene ganas, pero… no eligió el mejor destino. Seguimos hacia la cumbre del día, la Cabeza Mayor. Esto …. uff!! se hace largo … mira que lo sabía, parece que siempre tienes la cima ahí pero no terminas de llegar nunca.





Cumbre, cima, bonita foto. Otra vez allí. A darle al choricito de León (y al fuet del Mercadona … ja ja ja), había hambre, la corta noche tiene sus efectos. Buscamos cobijo, encontramos un vivac donde se está a gustito… a disfrutar del tema.







No queremos llegar tarde, ya se sabe que hay que atender al arroz, motivo por el cual renunciamos a la Cabeza Menor y emprendemos directamente la vuelta, esta vez por las Cortadillas. Ya se me había olvidado la nieve que se acumula allí, con los piornos y el arroyo por debajo hace que transitar por allí se convierte por momentos en algo tedioso, luchando contra los elementos, hundiéndonos hasta los …



¿y el Petao? Allí estaba, poco más abajo del Collado, subir había sido malo, bajar casi peor. Lo de … “¿Qué prefieres subir o bajar?” muchas veces no es tan evidente como pueda parecer. Al pobre hombre, le queda mucho día por delante, esta noche dormirá bien.

Así, sin más dilación, solo nos quedaba una cosa por hacer… tomar la cervecita, no había tiempo que perder. ¡¡Cervecita fresquita!!

Por cierto, como siempre… la cuesta del Pingarrón la penamos, al arroz no se llegó, alguno tuvo que merendar arroz, y del “Petao”… nunca más supimos. Pobre hombre, mal día tuvo.


Por cierto ... esta ... ¿cuenta como invernal?


Trasgu'2012.



5 comentarios:

  1. Desde luego la Norte de las Cabezas por Los Pulmones es de las fuertes de la zona. Te pones a ella, y llena una barbaridad. Además, es una suerte haber tenido nieve dura en el mes de abril.
    Menudo buen día

    Ahora bien, el “Petao” es que se metió muy adentro, y muy arriba, para descubrir que ese era un mal sitio para tener un mal día. Él y el compañero decían que físicamente OK, pero se le cruzaron los cables mucho y tenia miedo de caerse hasta de un montón de gravilla (tómese literalmente, en alguna zona sin nieve bajaba culo en tierra).

    S2

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  2. haber las cosas tienen su esplicacion las botas le habian calado los pies los tenia dentro de una piscina que era las botas le dolian esageradamente y casi no los podia apoyar

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    1. y si las bajadas le dan miedo ¿cada uno tendra sus propios miedos no??? de todas formas la subida la hizo lenta ya que su condicion fisica no le permite mas pero subio bien tampoco es la primera vez que sube en este invierno por ahi desde navidades que descubrio lo bonito de subir una montaña ha estado 2 veces en la cima de cabezas dos veces por donde subio y otra vez subiendo por donde bajo

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    2. Hola Anonimo,

      no es la misma persona de la que estamos hablando, debes estar confundido. Tu te estas refiriendo a otra persona, te lo aseguro.

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    3. "¿cada uno tiene sus propios miedos?" ... pues si, ¿y? nadie dijo lo contrario.

      S2

      Trassgu

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