lunes, 27 de diciembre de 2010

La Orvia: corredor Sur, El Argadiexo

“Una derrota peleada vale más que una victoria casual.”
(José de San Martín)

27 de diciembre de 2010.

La cosa no estaba fácil: un frente detrás de otro, nevadas continuas, nieve sin asentar, celebraciones familiares,… que si la ‘enemiga’ no me deja, que si tengo aquí a la familia, que si estoy en baja forma, … pero había que buscar un día para salir a dar una vuelta y disfrutar un poquito.



Intento ponerme en contacto con el equipo ‘tsazaniego’, solo Lito da señales de vida (aunque tampoco muchas!!!, el pobre hombre todavía sufría las consecuencias de tanta celebración familiar). Xiblo … tenía disculpa … ‘tengo que trabajar’. Pero … Setmil … ¡¡ni me cogía el teléfono!! Eso es un … ¡¡cagón!!, si, si, … lo que siempre se llamó … ¡¡un cagón!!

Finalmente, un día más tarde de lo que hubiera deseado consigo ‘engancharlos’. Para no dejar fuera a Xiblo, quedamos a media mañana (no esperaba que, debido a la calidad de la nieve, pudiéramos hacer gran cosa, con lo que tampoco me parece mal). Nos ahorramos el madrugón, matamos el gusanillo, veo de nuevo a los sherpas de Laciana, tomamos un bocado con buen ambiente, … y si todo sale bien, una cervecita. El plan era bueno, merecía la pena.



Finalmente cambian algunas caras: Lito se raja (parece que con disculpa creíble), Niblap decide tirar con los palillos, como dice Setmil, marcha a esquiar. Por el lado contrario, conozco a Keijan, un nuevo fichaje de los Reciecho, sobre el cual, después de conocerlo, puedo asegurar que… con mucho que aportar.



Yo había hecho algunas rutas de las que suelo calificar como ‘de francotirador’, lo que viene siendo ir directo a un sitio, sin ningún rodeo, sin perder un minuto, directo, rápido, raudo y veloz: vamos, lo hacemos y nos volvemos. Ahora bien, nunca había hecho un corredor tan ‘de francotirador’ como este día. Vamos … que me bajé del coche, subí el corredor, lo bajé y … ¡¡me monté en el coche otra vez!! Esto si que es ‘hacer un corredor de francotirador’.

Hoy subiríamos a la Orvia, por el corredor Sur, al cual se accede prácticamente desde la carretera. Cuando aparco en Cacabillo, después de los saludos correspondientes, Setmil rápidamente me señala el corredor: ‘¡¡es este!!’ (al parecer recomendado por Serbal). La verdad … ‘¡uff!’, al principio se me cae un poco el alma a los pies, vaya infierno nos esperaba (y yo con botas rígidas):”Lo que prometía ser una bonita mañana se covertirá en un infierno”.



Tiempo estimado: 3-4 h.
Desnivel acumulado: 500 m.
Distancia: 3,1 km.
Nivel: Técnica invernal básico-medio. Cuidado con el estado de la nieve.




Pronto estamos cuesta arriba, esta vez si que es verdad que solo había dos planes (to’parriba o to’pabajo). No había alternativa posible.





La subida, inicialmente, dura, incomoda, tediosa, un pestiño, se va pasando charlando con los acompañantes. Setmil sufrirá las consecuencias de no haber cogido el teléfono, siempre en tono amistoso y jocoso. Xiblo intenta pillar tono muscular, el que no había dejado desde las 2 de la madrugada, vaya campeón. Sobre Keijan, aprovecho estos momentos para charlar con él, surgen algunos planes de futuro, me conformo con cumplir alguno de ellos (a ver si hay suerte). Finalmente no queda lugar a la duda, este Keijan insufla aire renovado al grupo, además … ¡¡viene fuerte!! Se agradece.









Conforme progresamos en el corredor, el tedio va cambiando de sentido. Primero porque no había nieve y las piedras nos mataban, luego porque empieza a haber nieve, al principio, por los tobillos (parece que blanda), luego por las rodillas (sigue bastante suelta), finalmente por los … ¡uff! Salir de allí nos costaría un esfuerzo. “¡¡Hay que pelearlo!!”, comenta Setmil en los peores momentos. Esto era infernal, uno no sabía si seguir para arriba o ¡¡tirarse rodando cuesta abajo!!.

































Cuando uno ya está fuera, en el collado, todo se mira con otra cara: pues … que si la canal era bonita, … que si al final ha sido divertida, … que si hubiera habido nieve decente …; vamos … que el que no se consuela es porque no quiere. Yo siempre acabo disfrutando en la montaña, con lo que puedo decir que mereció la pena, pero aquello fue una pelea de cada uno, como podía, para salir de aquel ‘barrizal’ en el que nos habíamos metido. Divertido.







Así llegamos a la cumbre. Fotos de cumbre y pronto para abajo, el día no estaba para quedarnos mucho por allí arriba.







Decidimos bajar por la cara este. La primera parte se hace divertida, cómoda (por fin), pero pronto, hay que prestar un poco de atención para no quedar enriscado. Xiblo busca la salida a la situación, de forma que pronto llegamos al punto de partida.







Un bocado a los pies de la iglesia, cafecito caliente (de ese que le gusta a Lito), algún que otro ‘empujón’ para sacar el coche de la nieve, cervecita de despedida y … como ya se indicó … algunos planes para el futuro, unos cercanos otros a medio plazo. Alguno de ellos se cumplirá.



Nos vemos pronto.

Trasgu, 2010.

PD: Setmil … ¡¡cagón!! … coge el teléfono … ja ja ja

martes, 30 de noviembre de 2010

De tubos en Peñalara

“Afilad vuestros hierros y limpiad vuestras empuñaduras compañeros, pues vamos a tierras Castellanas.TATATATAAAAAN!!!” (robres)

27 de noviembre de 2010.

ñiiiiiic!! ñiiiiiiic!! ñiiiiiiiic!!

Había nevado, por la información que teníamos parecía que había poca nieve, pero … había nieve … Buscasombras invierte los días de la semana en afilar los pinchos …. ñiiiiiic!! ñiiiiiiic!! ñiiiiiiiic!! … había que empezar la temporada invernal, no podíamos perder ni un día.



Tras varios correos intercambiados, con intentos incluidos de recuperar a ‘viejos’ uno-gradistas, finalmente solo quedamos para la inauguración Buscasombras y Trasgu, últimos representantes de esta especie en grave peligro de extinción que un día campara por las montañas de España.

Cometo una torpeza, quizás motivada por la ansiedad, “¿qué plan tenemos?” le pregunto, “je je je … el mismo de siempre:
Plan A: to’parriba
Si todo falla … Plan B: to’pabajo”, me contesta Buscasombras, “ja ja ja “.





Tiempo estimado: 4-5 h.
Desnivel acumulado: 731 m.
Distancia: 9,8 km.
Nivel: Técnica invernal básico-medio. Cuidado con el estado de la nieve.







Son las 8:30, allí estamos, en el aparcamiento de Cotos, donde el ansia por pisar nieve se percibe en el ambiente, que mejor lugar que Peñalara para inaugurar la temporada invernal 2010-2011. Cerca de nosotros, otro grupo de apergaña, los miro, pero no les presto atención, más tarde formarían parte de uno de los momentos claves del día.

La mañana se presenta despejada, hace frio, pero se lleva bien, agradable. No hay destino, no tenemos objetivo, solo subir, subir y subir, donde sea, donde haya nieve, donde se pueda clavar piolo, si es posible … con poca gente, emprendemos camino a la Laguna Grande, allí decidiríamos. ¿Cuántas veces habremos hecho este mismo recorrido? Unas veces con objetivos muy claros … otras muchas, como hoy, sin saber que haríamos, pero seguros de hacer algo. Sin duda decenas de veces habremos subido esta pista, siempre con la esperanza de acabarla pronto, siempre en agradable conversación, distendida, entretenida, … ante lo cual todavía queda lugar para las dudas “¿Qué hace aquí esta caseta? Tiiioo lleva toda la vida ahí” … “¿no te parece que han movido este bando de sitio? Pssss si tu lo dices ….”.





Ya en la Hoya, apreciamos que hay nieve, más de la que inicialmente pensábamos, huyendo de la muchedumbre, muy difícil en el día de hoy, cruzamos el puente hacia el espolón sur de Peñalara, todavía no había objetivo definido. Aquí encontraremos nuestro objetivo para hoy, el cual nos llevaría, con sorpresa incluida, a ‘nuestros’ ansiados tubos, porque son un poco ‘nuestros’, por todos los momentos que nos han permitido disfrutar con ellos.



Ya tenemos objetivo … el tubo que uno divisa justo en la prolongación del espolón sur (¿central de los bordillos?): parece bonito, creemos que no lo hemos subido nunca … parece entretenido, no hay mucha gente, cumple con todas la condiciones. Además… creemos que nos dejará cerca de la cima, para llevarnos la n-ésima cumbre en Peñalara.



Así llegamos a su base, donde buscamos un hueco entre un grupo de montañeros que allí se preparaban para hacer lo mismo; que curioso … los mismos del aparcamiento. Esta vez me fijo en ellos, sin grandes motivaciones para llamar mi atención. Saco piolos, saco pinchos, pongo arnes, … a ver cómo era esto … como dice Buscasombras, que no se nos olvide, ‘lo pinchos para abajo’, …, mientras sigo prestando atención al grupo que nos acompaña, “el otro día en el Espigüete …” comenta uno de ellos, se me levantan las orejas, … ahora si tengo motivos para prestar atención a lo que dicen …, me fijo en sus caras … una de ellas me resulta familiar … joder!! Creo que es Fafi, esta vez no me quedo con las ganas, no podía perder la oportunidad (ya perdí alguna)…

“Perdona, eres FAFI??”
“Otro al que le debe dinero” (contestan sus 'amigos', ja ja ja)
“Si soy yo” (contesta FAFI),
“soy Trasgu, tiiioo!!, te vi en Galayos, pero por entonces no te tenía fichado,”
“Hostia Trasgu!! la fama te precede!! ¿pero tu no estabas por León?” … estaba, estaba …
“ja ja ja, que bueno!!!”


Qué gran alegría, todo un personaje, con quien había ‘escrito’ varias cosas en foros diversos, pero no lo conocía, hasta hoy. Por fin conozco al gran Fafi, un gran personaje de las montañas. Encantado, todo un placer. Espero compartir algún día de montaña con esa Panda, un buen grupo con buena gente, al menos por lo que leo … je je je.



Pasado este momento cumbre del día, solo nos queda hacer lo que habíamos venido a hacer… pisar nieve!! si es cuesta arriba mejor. Este tubo es disfrutón, que bien me lo paso, me encanta … “joe … y uno, con estos pinchos, no se cae, parece mentira”, “como agarra esto”, es el primer día de invernal del año … allí estábamos como niños con zapatos nuevos.







El tubo se acaba pronto, o a mi se me hizo corto, muy corto, que pena. Parece que solo nos queda buscar la cima. En el trayecto a la supuesta cima aprovechamos cualquier escalón para jugar, pincha aquí, pincha allí, que si el ‘escalón Hillary’, que si la ‘postura del gato’ (¡¡vaya flexibilidad!!, mira que es difícil subir la pierna tan alto cuando llevas unos botorros y unos pinchos atados en los pies).









Tiiiiiiiiiiiiiooo!! La hemos cagao!! Que cagada!!, que cagada!! Nos hemos dejado llevar por la ilusión!!!. ¿Qué le pasará a Buscasombras? Pienso mientras. Al llegar a su nivel me doy cuenta de la foto que tenía delante: la cima estaba lejos, bastante lejos, nos quedaba por delante toda la desagradable pala de Peñalara, justo lo que no queríamos, que pereza, ¡¡la hemos cagao!! ¡¡la hemos cagao!! ¿qué hacemos?

Enfrente tenemos el tubo Sur de Peñalara (no entiendo porque le llaman suroeste, cuando es sur), que bonito. Lo malo … es que hay que bajar para volver a subir. Parece que la cagada nos motiva, la pala de Peñalara es demasiado, no nos podemos quedar aquí. Nos decidimos pronto … el plan A (to’parriba) ha fallado, pasamos al plan B (to’pabajo) para luego poder volver a aplicar de nuevo el plan A (de nuevo … to’parriba), ja ja ja, un uno-gradista nunca se rinde, ¡¡cambia de plan y se acabó!! Esto formará parte de los momentos más grandes jamás vividos por los uno-gradistas.







Disfrutamos del tubo Sur, aprovechamos los últimos momentos y así llegamos a la cumbre, donde nos reencontramos con la Panda Montañera, ellos habían llegado antes que nosotros (… tanto cambio de plan tiene sus consecuencias), ya marchaban para el ‘encajonado’, no se cómo se les daría.

En la cumbre solo nos queda disfrutar de la ‘soledad’ que te puede dar Peñalara, ‘soledad’ abrumadora, ‘soledad’ sobrecogedora, ‘soledad’ … ¿Cómo coño puede haber siempre tanta gente en esta cima? No se si me equivoco, pero creo que es la cima más visitada en España.



Aquí, en el día de inauguración invernal, solo nos queda buscar nuestro hueco y disfrutar de las vistas y los placeres del yantar, todo regado, como no podía ser menos, como se merecen las grandes ocasiones, con algún caldo espumoso, … ya conocido de otras ocasiones.



Ya en el descenso, solo nos queda decidir por donde bajamos. Yo por evitar Dos Hermanas (equiparable a los Barrerones, el Minguete, … como una de las grandes fobias de un uno-gradista), me tiro por donde sea. Buscasombras no está por la labor, pero acabamos metidos en el Tubo Central, donde dejamos fichado para el futuro el tubo del Robot y el del Duro. Tiene nieve suficiente y se baja con gusto, incluso el pequeño resalte se pasa con comodidad. Buscasombras no termina de tener clara la elección tomada, pero … no queda otra, ja ja ja.









Ya de camino a la cervecita de homenaje, entre soniquetes, rimas y tarareos, disfrutamos de los últimos momentos de un bonito día de montaña, el cual quizás podamos tomar como el día donde los uno-gradistas se cruzan con la Panda Montañera, …



“Soy un trovadooooooooor ,
que sube al monte con ardooooooooooor,
…”


Ja ja ja ja ….
Trasgu’2010.