domingo, 31 de mayo de 2009

Garganta del Infierno - Maliciosa - Barranca

31 de Mayo de 2009

En esta ocasión, acabado el periodo de nieves, tenía decidido que había que volver a La Maliciosa, donde hacía mucho tiempo que no había subido.







Empiezo a buscar acompañantes. Después de tener muchos y diversos candidatos al final nos quedamos: Xfera, Pak Maldini (nueva adquisición) y yo (Trasgu). Después de coordinar como llegar todos al punto de partida (Valle de la Barranca) y superar los problemas matutinos de los excesos de la noche anterior, allí nos vemos los tres, prestos y dispuestos.

Inicialmente la intención era subir por la clásica del Valle de la Barranca hasta el Piornal, hacer cumbre en La Maliciosa y posteriormente, dependiendo de la hora decidir que se hacía.



La Maliciosa es una de las montañas más importantes y altas de la Sierra de Guadarrama (sierra perteneciente al Sistema Central), con una altitud de 2.227 metros sobre el nivel del mar. Está situada en el noroeste de la Comunidad de Madrid (España), alzándose entre La Pedriza, que queda al este, y el valle de la Barranca, que está en su vertiente oeste.

Originalmente, a este pico se le conocía como la "Montaña Maliciosa". Esto es debido a la dificultad que tiene su ascenso, excepto por su vertiente norte. Tiene una orografía bastante escarpada y hay un desnivel acumulado superior a los 1.100 metros. Más tarde, el nombre se abrevió y actualmente se la conoce como "La Maliciosa" o el "Pico de la Maliciosa". Esta montaña también es conocida como "La Monja" por su parecido a un tocado monjeril cuando está cubierta de nieve.[1] El nombre de esta montaña se encuentra en el siglo XIV, y como la Maladeta en los Pirineos, La Maliciosa en la Sierra de Guadarrama es la maldecida, cuya roca siempre desolada y desnuda recibe los ataques del viento, hielo, agua y sol.

Una vez puesto en marcha en plan A, todo para arriba, entre charloteos, explicaciones y bromas se nos pasa el desvío para la fuente de la campanilla. De esto me doy cuenta al ver la fuente de Mingo.



En lugar de volver atrás decidimos seguir en el sendero que llevamos, a ver donde llegamos para posteriormente buscar el objetivo del día: La Maliciosa.







Una vez que salimos del pinar, me sorprende comprobar que estamos en la Garganta del Infierno. La verdad es que no esperaba estar tan al Oeste. Ante esta solución no queda alternativa: vamos a ver la Bola del Mundo (Alto de las Guarramillas) y de aquí a la Maliciosa. Allí en la famosa senda de la Tubería, debajo de los Emburriaderos, podemos ver algunos escaladores agarrados a la roca. Pak Maldini hace firme propósito de que alguna vez le gustaría probar: quedamos emplazados!!







La Bola del Mundo, o Alto de las Guarramillas, es una montaña de la Sierra de Guadarrama (sierra perteneciente al Sistema Central) ubicada en el límite de las provincias españolas de Madrid y Segovia. Tiene una altitud de 2.265 metros y es la montaña más occidental del cordal montañoso de Cuerda Larga. Muy cerca de la cumbre, en la cara este, está el Ventisquero de la Condesa, una zona con emanaciones de agua que constituye el nacimiento del río Manzanares. En su cima hay unas antenas para la emisión de la señal de radio y televisión y su envío hacia la vertiente norte de la Sierra de Guadarrama.



La procedencia del nombre "Bola del Mundo" es desconocida y bastante reciente, ya que apareció con la instalación de las antenas repetidoras de la señal de televisión y radio a finales del siglo XX. "Alto de Guarramillas" forma parte de las "Guarramas", un conjunto de elementos de relieve situados en el entorno de esta montaña. "Guarramas" es un topónimo que proviene de la palabra medieval "Guadarramiellas", que a su vez viene de "Guadarrama", el nombre de la sierra donde está la montaña.



Estas tres grandes antenas están cubiertas por un radomo calefactado en forma de cohete para protegerlas del hielo (a mi siempre me recordó a los de Tin-Tin), son visibles desde varios kilómetros a la redonda y constituyen la mayor peculiaridad de esta montaña, la cual es de muy fácil acceso desde el Puerto de Navacerrada. En la actualidad el número de antenas se ha reducido bastante tras haber sido derribadas en diversas ocasiones por los fuertes vientos de la zona, y no es de extrañar que en un futuro desaparezcan totalmente cuando pierdan su función y sean sustituidas por las emisiones de satélite.

Ya en la Bola del Mundo comprobamos el 'jolgorio' que hay allí montado. Tenía organizada una cronoescalada, corriendo, desde el aparcamiento donde habíamos dejado el coche a la Bola del Mundo. La verdad es que tiene mérito lo de esta gente: allí llegaban 'desfigurados', como podían, preguntando cuanto faltaba a la cima, resoplando cual búfalo, ... en fin todo un esfuerzo. Esta situación hace las delicias de Pak Maldini, que ve reflejadas sus aficiones maratonianas en estos corredores. Pak Maldini se queda interesado en conocer por donde han subido. Este deseo le será complacido: el camino de subida de los corredores era nuestro camino de subida previsto (que perdimos) y ahora será nuestro camino de bajada.





Finalmente hacemos cima en la Maliciosa donde tomamos algunas de las viandas que cada uno traía, descansamos media hora, contemplamos las vistas (al fondo la Pedriza, pronto iremos allí), y ale, al plan B: todo para abajo, esta vez por la directa de la Barranca.







Allí Pak Maldini comprueba la dificultad de lo que habían hecho una hora antes todos aquellos corredores: un terreno realmente pindio, muy descompuesto, donde en ocasiones era difícil mantener el equilibrio. No era de extrañar que más de uno llegara con las rodillas ‘solladas’. Aquello daba más mérito a lo que habíamos presenciado.



Ya de nuevo en el pinar, disfrutamos de la famosa fuente de la campanilla, donde la parada de rigor siempre se hace disfrutona.



Por último ponemos rumbo directo a lo que sería el último de los objetivos para el día de hoy …





el cual cumplimos los tres sin muchos problemas esta vez.

Trasgu, Mayo 07

sábado, 2 de mayo de 2009

Arista este del Espigüete

2 de mayo de 2009

En esta ocasión mis intenciones eran muy distintas al objetivo final, puesto que mi ‘cuñao’ Xfera estaba dispuesto a retomar ‘esto de la montaña’, pretendía hacer algo más flojo por Somiedo. No obstante, en la víspera de la salida, me dice que ‘su amigo’ le había hablado de un tal ‘Espigüete’ que al parecer estaba muy bien: “¿lo conoces?”

A mí se me pusieron los ojos como a una lechuza. Pienso, “Uff!! Con las ganas que le tengo, esta es la mía”. Decido ir para allí, aunque solo sea para ‘verlo’, lo monto todo en una tarde y allí vamos (en principio sin intenciones de hacer cumbre).

Decido hacer la arista este, o al menos lo que el cuerpo nos permita (Xfera llevaba unos meses de inactividad, al menos en lo que a la montaña se refiere).







Nos levantamos bien temprano y a las 7:30 ya estábamos en el aparcamiento de Pinollano. Previamente ya habíamos divisado el famoso ‘Espigüete’, montaña emblemática donde las haya.

Después de algunas dudas iniciales sobre por dónde tomar la arista preguntamos a un grupo que se estaban preparando allí mismo. Estos nos aclaran por donde debemos salir. Con estas aclaraciones y alguna indicación posterior, nos ponemos en la arista. A partir de aquí solo había un plan posible: “to pa’rriba”. Todo estaba ‘jitao’ con lo que era difícil perderse.





La arista, como cabía esperar, es una subida constante, 1100 metros hasta la cima. Los primeros 800 m., donde se superan dos pequeños ‘picos’ y un collado entre ambos se puede considerar muy cómoda, con alguna pequeña trepadilla que incluso la hace entretenida.









A partir del segundo pico, hasta la cumbre oriental la cosa cambia bastante.

Lo cierto es que Xfera, no se porta nada mal, a un ritmo constante, sin paradas abusivas llegamos hasta el collado, habiendo superado el primero de los picos y prácticamente 800 m. de desnivel, 2200 de altitud. No me lo podía creer!! ¿a ver si vamos a llegar al final?



A partir de este collado empezamos a tener nieve. Vemos la primera de las famosas canales Nor-orientales. Habrá que volver a hacer alguna de ellas (¿eh Buscasombras?).





Algo que me sorprendió bastante es que esperaba ver a bastante personal por esta ruta: un puente de Mayo, en el Espigüete, día soleado, … , todo perfecto. Sin embargo, solo vimos a una pareja que como luego diría xfera, “nos pasaron como un Spunik ”, a lo cual añadió, “yo ya cojeaba algo, para no quedar mal del todo, je, je”.

Lo cierto es que, ya subiendo al segundo pico, Xfera me dice que le ha dado un tirón y no sube más. Yo, como daba por hecho que estaba “bastante cansado” y no quería forzar mucho la situación, le comento que “de acuerdo, paramos aquí”.

Vaya lío!! la cumbre allí, parecía que ya la tenía al alcance, Xfera fastidiado, la primera vez en el Espigüete, … ¿cómo iba a renunciar a ella?. Lo pienso un momento …

“¿qué podemos hacer?
Ya está tío, toma: el té, el chorizo, el pan, los cacahuetes, una botella de agua …
Hace buen día, siéntate un rato que no te de mucho el viento, y espérame que voy a intentar hacer cumbre.
Tardaré sobre una hora”.

Hace 10 minutos nos había pasado la pareja que comentaba antes, para no ir solo del todo, marcho justo detrás de ellos. “Si me caigo o me pasa algo, estos al menos podrán decir donde me vieron la última vez”, pienso en aquel momento.

Al poco de partir del segundo pico, me doy cuenta de que aquí empieza realmente la famosa ‘arista este del Espigüete’. Ya hasta la cumbre oriental me encontraré piedra y nieve de forma indistinta (lo cual me hizo decidir no poner los crampones en ningún momento), a la izquierda una pared prácticamente vertical (daba miedo mirar allí), a la derecha unas caídas ‘considerables’. La cosa se ponía seria: “menos mal que no pasó Xfera” pienso mientras voy disfrutando de las vistas.





Ahora comprendo muchos de los accidentes que se producen en el Espigüete: a mi parecer es una montaña muy, muy peligrosa.

Después de un rato, siempre detrás de la famosa pareja, empiezo a pensar que tenía que volver: “me va a tocar volver solo!!”, lo cual me provoca bastante intranquilidad porque “Xfera no viene a buscarme ni de coña, este me deja tirado, je je je”.

Finalmente, después de ver, ahora sí, el corredor noreste, por donde subían tres montañeros, llego a la cumbre oriental: “buff!! Impensable hace dos días!!”. Yo más contento que “pichote”.







Ha pasado una hora desde que dejé a Xfera allí sentado. Miro a la cumbre Occidental y veo que todavía me falta un buen tramo:yo esperaba entre las dos cumbres una arista bastante más corta, un estilo a la de Peña Ubiña, sin embargo hay un buen trecho.



“Si voy allí Xfera me va a estar esperando 3 horas, es demasiado. Además, volver tiene tela!!”. Decido dejarla para otro momento, cojo el piolo y un bastón y despacito (para mi bajar siempre fue peor que subir), con mucho cuidado, a buscar a Xfera.



En 45 minutos, con el culo “apretadillo” llego a donde me estaba esperando. Comemos algo, le cuento un poco la jugada, y para abajo (qué esa tarde había futbol y teníamos que llegar a verlo).

En la bajada, por variar un poco el camino decidimos tomar una pedrera donde Xfera, fruto del cansancio, sufre todo tipo de odiseas: que si me caigo, que si me tropiezo, tíiio, me duele el brazo, ahora el tobillo, … al final de la pedrera que se le hizo eterna lo describía bien: “Tiiiioo!! el peor día de mi vida!!”, y eso que todavía le quedaba la puntilla.



Al final de la pedrera, todavía a 300 metros de desnivel sobre el aparcamiento tenemos que elegir entre: subir un poco y retomar la arista o meternos en un bosque de pequeños robles que había por allí. Yo me imaginaba la decisión, pero le pregunté a Xfera: “por el bosque!! Y a la trocha!!” (ya tenía yo claro que no subíamos más).



Aquello fue el remate: parecía que los arboles, ramas, hojas, piedras, … todos le atacaban, ninguno le dejaba pasar, vaya infierno!! Finalmente después de unas risas y tropezones, llegamos a la carretera, a un km. del aparcamiento.

Aunque Xfera no se lo terminaba de creer, llegamos al coche!!, algún resoplido final y a por la cervecita (que hoy nos la hemos ganado de verdad!!), con una última mirada al Espigüete.



En fin, que esta vez gracias Xfera pudimos salvar un día que no prometía nada en especial. Respondió como un campeón!! (Gracias Xfera)

Trasgu, 2 de mayo de 2009

PD: por cierto, parece que en rumbo 140º, muy lejos se ven unas montañas, creo que es el Pico del Lobo (no hay otra opción).